lunes, 13 de abril de 2015

Sobre la toma de Granada por los Reyes Católicos

Dios misericordioso, que infundió la fuerza e y n el brazo del inclito Fernando, quiso también infundir el consejo y la prudencia, porque al cabo de diez años Granada cayó en su poder, parte por rendición, parte por convenio, y parte debido al oro y la plata con que se untó a los alcaides moros de muchas fortalezas con el fin de que las entregaran, facilitándoles, además, los medios de huir a África y abundante conducho para que no desfalleciesen de hambre por el camino.
J. MÜNZER, Viaje por España y Portugal en 1494 y 1495, 1924, p. 99.